El proyecto impulsado por el Gobierno porteño es interesante y viable porque propone una modificación a la ley de “Basura Cero” de modo de posibilitar la utilización de tecnología de avanzada, probada en el mundo, para la generación de energía a partir de los residuos. Se trata de una muy buena iniciativa que de sancionarse permitirá complementar el sistema de reciclado vigente que exitosamente viene teniendo lugar en la Ciudad, contribuyendo a la reducción progresiva de la cantidad de residuos que van a disposición final en relleno sanitario. A la continuidad de la separación en origen, la incorporación de más puntos verdes y el crecimiento del Centro de Reciclaje de la Ciudad (en el que se tratan residuos áridos, restos de poda, plásticos PET y material orgánico), con la termovalorización introduciríamos en el sistema una alternativa para no tirar aquellos residuos que no se pueden reciclar, obteniendo además energía, tal como utilizan grandes ciudades europeas, incluyendo París, que tiene una planta de este tipo muy cerca de la emblemática Torre Eiffel.

La basura es un tesoro, cuanto más la aprovechemos, más ganamos en desarrollo y más gana la protección ambiental.